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¿NADA LA OPOSICIÓN CONTRA CORRIENTE?
Decía Luis Alberto Monge que “si decido que alguien es amigo, los que hablan negativamente de esa persona me caen mal.” Algo que muchos no saben es que mantuvo una amistad con Rafael Ángel Calderón; eran adversarios políticos, pero “caían bien” uno al otro. No le gustaba si se hablaba mal del líder del partido opuesto a él.
Ahora los miembros y representantes del partido político de Monge se han puesto emocionalmente en contra del presidente Rodrigo Cháves. Si Chaves dice que es un día bonito, ellos dicen que no lo es. Estos herederos de Monge honran la misma bandera del ahora difunto expresidente, pero no su sabiduría. Peor aún, parecen monaguillos del Frente Amplio y todos hacen genuflexiones frente a los mismos altares a la ignorancia.
Por si fuera poco, y parece increíble, se alían con el medio escrito que tradicionalmente ha sido enemigo del verde y blanco. Para los más jóvenes se les informa que hace varios años se decía que solo existían dos partidos políticos – Liberación Nacional y La Nación.
La realidad es que el pueblo costarricense, que al final de cuentas es el que manda en el país, está satisfecho con las labores de Rodrigo Cháves. Él es popular, y lo ven como un presidente interesado en traer cambio favorable, aunque pise a los pies de los gamonales de siempre. En las encuestas las opiniones favorables de él fluctúan permanentemente entre 62 y 70.
Cabe preguntar pensando siguiendo la idea de Monge-- al 70 por ciento del pueblo que consideran que Cháves es buena gente y haciendo una buena labor, ¿qué les parece los diputaditos de la Asamblea que pasan criticándolo? Por sí, hay opinión muy negativa de la labor de la legislatura actual. ¿Estar en oposición casi de reacción instintiva ayuda frente al pueblo hacia el futuro? Y más importante, tomando en cuenta la ayuna en legislación que caracteriza esta asamblea, ¿hace algo positivo para el pueblo que teóricamente sirve?
Cuatro expresidentes recientemente firmaron una declaración internacional criticando a Cháves por ser “ante libertad de prensa.” ¿Cambia algo dentro del país con esas firmas? En el exterior deja a Costa Rica mal, pero con su terrible ansia de figurar rubricaron el documento. Con excepción del Premio Nobel, todos reciben opiniones desfavorables mayoritarias de sus compatriotas; ¿mermarán las opiniones desfavorables entre los habitantes? Probablemente inspirarán la reacción clásica – “pobrecitos.”
Cuando hay un mandatario impopular una estrategia para un candidato presidencial del futuro es la de criticarlo. “Si yo fuera presidente las cosas estarían mucho mejores” dirán. Pero si atacan un mandatario popular lo que parecen es “tontos.”
En circunstancias como la actual, un aspirante tiene que hablar de la esperanza que puede mejorar “aún más” si su partido y él o ella ganara en 2026. La frase clave es “un futuro sin límites.” Y la verdad es que es cierto. Costa Rica ha demostrado incontables veces que es un país diferente con muchísimas oportunidades. Ignoremos todos los monaguillos de la Asamblea y trabajemos para lograr un país mejor.
Carlos Denton | cdenton@cidgallup.com